Elon Musk, propietario de X (antes Twitter), denunció este lunes un ciberataque masivo que afectó el funcionamiento de la plataforma, sugiriendo que Ucrania podría estar detrás del incidente.
En una entrevista con Fox News, Musk afirmó que las direcciones IP asociadas al ataque provienen de Kiev, lo que indicaría una acción coordinada desde ese país. "Hemos identificado un ciberataque masivo destinado a colapsar los servidores de X, con tráfico sospechoso proveniente de la región ucraniana", declaró el magnate.
La caída parcial de la plataforma ocurrió entre la noche del 9 de marzo y la mañana del 10 de marzo, afectando a miles de usuarios en Estados Unidos, Canadá, Reino Unido y otros países. De acuerdo con Downdetector, el portal especializado en monitoreo de servicios en línea, X registró múltiples fallas en la carga del sitio, la aplicación móvil y el acceso a publicaciones. El pico máximo de reportes se dio a las 10:00 AM ET (14:00 GMT), con más de 40,000 registros de incidencias.
A través de una publicación en X, Musk aseguró que la plataforma enfrenta ataques diarios, pero en esta ocasión "se emplearon recursos sin precedentes". Explicó que el equipo de ciberseguridad de la empresa sigue rastreando el origen del ataque, el cual podría haber sido orquestado por un "grupo grande y coordinado y/o un Estado".
Las fallas en X incluyeron lentitud en la carga, errores de código 520 relacionados con servidores web y dificultades para actualizar el muro de noticias. Aunque la plataforma ha restablecido parte de su funcionalidad, algunos usuarios continúan experimentando problemas intermitentes.
En paralelo, el incidente también tuvo repercusiones en el mercado bursátil. Las acciones de Tesla, la compañía de vehículos eléctricos de Musk, cayeron más de un 8% en Wall Street, acentuando una pérdida acumulada de más del 40% en lo que va del año. Hacia las 15:00 GMT, los títulos de Tesla cotizaban en 239,51 dólares, reflejando la preocupación de los inversionistas sobre la relación de Musk con la política estadounidense y su impacto en sus negocios.
Este ciberataque se produce en un contexto de tensiones crecientes entre Musk y el gobierno ucraniano. En días recientes, el empresario sugirió desconectar el acceso de Ucrania a la red satelital Starlink, lo que provocó fuertes críticas por parte de la oposición italiana, que cuestiona un posible acuerdo de ciberseguridad entre el gobierno de Giorgia Meloni y SpaceX, la empresa de Musk.
La negociación, valorada en 1,600 millones de dólares, busca dotar a Italia de telecomunicaciones seguras para sus diplomáticos y militares. Sin embargo, partidos opositores han expresado su desconfianza hacia Musk tras sus recientes declaraciones. "No es un socio fiable", afirmó Carlo Calenda, líder del partido centrista Azione.
El incidente deja en evidencia el papel de Musk no solo como empresario tecnológico, sino también como actor político influyente en conflictos internacionales.
Fuente: El Universal
