República Dominicana
Tras una aplastante derrota en las últimas elecciones municipales, congresuales y presidenciales en la República Dominicana, los principales partidos de oposición han decidido tomar el 2025 como un período clave para reorganizarse y hacer frente al dominio del Partido Revolucionario Moderno (PRM). Este partido, vencedor en las pasadas elecciones, consolidó un poder significativo tanto en el Congreso como en las alcaldías del país.
El PRM no solo logró mantener la presidencia, sino que también ganó la mayoría de las alcaldías y una amplia representación en la Cámara de Diputados y el Senado. Esta victoria ha otorgado al oficialismo un respaldo político suficiente para tomar decisiones sin la necesidad de apoyo de la oposición.
De cara al 2025, el PRM no tiene planes políticos definidos y se concentrará en la gestión estatal, evitando en principio cualquier tipo de aspiración electoral futura. Así lo expresó su presidente, el ministro José Ignacio Paliza, quien subrayó que las candidaturas fuera de término serán sancionadas.
Mientras tanto, algunos miembros del PRM, confiados en su victoria, habían comenzado a planificar sus candidaturas para el 2028, pero estos esfuerzos fueron detenidos por la dirigencia del partido, que ha priorizado el trabajo de gobierno durante su segundo mandato consecutivo. La mayoría de los miembros de la Dirección Ejecutiva del PRM ocupa actualmente cargos públicos, lo que les obliga a concentrarse en su labor estatal.
Tras los resultados electorales de mayo, la Junta Central Electoral (JCE) confirmó que el PRM obtuvo más del 58.39% de los votos en las elecciones presidenciales, seguido por la Fuerza del Pueblo con un 27.68% y el Partido de la Liberación Dominicana (PLD) con un 10.79%. Esta derrota generó un fuerte impulso interno en el PLD, que aceleró su proceso de renovación antes de lo previsto, eligiendo a nuevas autoridades para fortalecer la estructura del partido.
A finales de noviembre, durante la juramentación del Comité Político del PLD, Johnny Pujols, nuevo secretario general, destacó la importancia de utilizar el 2025 para fortalecer la organización a nivel nacional. A partir de diciembre, comenzaron una serie de visitas a las provincias para evaluar el estado de las estructuras locales y preparar el terreno para las elecciones de 2028.
Aunque el PLD ha enfrentado críticas internas y algunas renuncias desde su salida del poder, la cúpula del partido restó importancia a estos hechos, asegurando que la prioridad es alcanzar la victoria en las próximas elecciones.
A pesar de la derrota en 2024, la Fuerza del Pueblo, liderada por el expresidente Leonel Fernández, logró posicionarse como la segunda fuerza política del país, superando al PLD en términos de representación en el Congreso, donde aumentó su número de diputados de 18 a 28.
Este partido está trabajando en un proceso de renovación para el 2025, con un enfoque en las estrategias que le permitan competir de manera directa con el PRM en las futuras elecciones. Se espera que el partido concluya su segundo congreso en abril de 2025, donde los militantes elegirán nuevas autoridades. Es probable que Leonel Fernández continúe al frente, dado que no ha surgido ningún otro dirigente con interés en disputar la presidencia del partido.
Fundado hace cinco años tras una escisión del PLD, la Fuerza del Pueblo ha operado hasta ahora con autoridades provisionales, y su próximo congreso definirá la estructura definitiva del partido.
Aunque el 2025 no se perfila como un año electoral en sentido estricto, los partidos opositores están poniendo en marcha sus planes de reorganización y fortalecimiento. Su objetivo es frenar el crecimiento del PRM y competir con fuerza por los cargos congresuales, municipales y la presidencia en las elecciones de 2028.
Fuente: Diario Libre
