Equipo de Trump recomienda eliminar subsidios a vehículos eléctricos y aranceles a baterías

Redacción

Estados Unidos

El equipo de transición del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, está recomendando importantes modificaciones que buscan frenar el apoyo a los vehículos eléctricos y las estaciones de recarga, al mismo tiempo que refuerzan las medidas para limitar la entrada de autos, componentes y materiales de baterías provenientes de China, según un documento obtenido por Reuters.

Estas propuestas, que no se habían dado a conocer previamente, surgen en un contexto en el que la adopción de vehículos eléctricos en Estados Unidos ha disminuido, mientras que la industria china de vehículos eléctricos, fuertemente subvencionada, sigue expandiéndose gracias a su cadena de suministro de baterías más eficiente.

Durante su campaña electoral, Trump prometió reducir las regulaciones para los automóviles con motores de combustión interna y revertir las políticas de su predecesor, Joe Biden, respecto a los vehículos eléctricos.

El equipo de transición también sugiere imponer aranceles globales a todos los materiales de baterías, con el objetivo de impulsar la producción nacional, para luego negociar exenciones con los aliados, según el documento.

Estas propuestas marcan un alejamiento significativo de la política del Gobierno de Biden, que busca fortalecer una cadena de suministro de baterías independiente de China y acelerar la transición hacia los vehículos eléctricos.

Además, el plan redirigiría los fondos destinados a la construcción de estaciones de recarga y a la accesibilidad de los vehículos eléctricos hacia prioridades de defensa nacional, como asegurar el suministro de baterías y minerales críticos, sin depender de China.

El equipo de transición de Trump, encargado de desarrollar una estrategia para implementar rápidamente estas políticas, también propone eliminar el crédito fiscal de 7,500 dólares para la compra de vehículos eléctricos, una medida previamente reportada por Reuters.

Estas acciones podrían tener un impacto negativo en las ventas y producción de vehículos eléctricos en Estados Unidos, justo cuando empresas como General Motors y Hyundai han comenzado a ofrecer una mayor variedad de vehículos eléctricos en el mercado estadounidense.

La reducción de las subvenciones también afectaría a Tesla, liderada por Elon Musk, quien ha invertido más de 250 millones de dólares para apoyar la elección de Trump. Sin embargo, Musk ha señalado que la eliminación de estos subsidios perjudicaría más a sus competidores que a su propia empresa.

El equipo de transición sugiere utilizar los fondos restantes del plan de Biden para la construcción de estaciones de recarga y destinarlos al procesamiento de minerales para baterías, así como a la "cadena de suministro de defensa nacional e infraestructuras críticas".

El documento señala que, aunque las baterías, minerales y componentes de vehículos eléctricos son esenciales para la producción de defensa, los vehículos eléctricos y las estaciones de recarga no lo son.

En los últimos años, el Departamento de Defensa de Estados Unidos ha destacado las vulnerabilidades estratégicas relacionadas con la dominación de China en la extracción y refinado de minerales cruciales, como el grafito y el litio para baterías, así como los metales raros utilizados en los motores de vehículos eléctricos y aviones militares.

Un informe del gobierno de 2021 advertía sobre las crecientes necesidades energéticas del ejército de Estados Unidos para armamento y tecnología de comunicación, subrayando que asegurar fuentes de minerales y materiales críticos es fundamental para la seguridad nacional.

Karoline Leavitt, portavoz de la transición de Trump, afirmó que los votantes le dieron a Trump un mandato para cumplir sus promesas de campaña, incluida la protección de los autos de gasolina.

"Cuando asuma el cargo, el presidente Trump apoyará la industria automotriz, brindando espacio tanto para los autos de gasolina como para los vehículos eléctricos", declaró Leavitt en un comunicado.