Sentencian a Genaro García Luna a 38 años de prisión por vínculos con el Cártel de Sinaloa

Redacción

 
México

Genaro García Luna, exsecretario de Seguridad Pública de México, ha sido condenado a 38 años de prisión por un tribunal en el Este de Nueva York. La sentencia fue dictada por el juez Brian Cogan, tras ser declarado culpable en febrero de 2023 de cinco cargos relacionados con el tráfico de cocaína, sus vínculos con el Cártel de Sinaloa y falsedad de testimonio.

Además de la pena de prisión, García Luna deberá pagar 2 millones de dólares y cumplirá cinco años de libertad supervisada una vez que complete su condena.

La evidencia presentada durante el juicio mostró que García Luna recibió millones de dólares a cambio de facilitar el tráfico de grandes cantidades de cocaína hacia Estados Unidos. En el tribunal, el exfuncionario llegó vestido con un traje azul marino, evidenciando su estatus, en lugar de un uniforme penitenciario.

Horas antes de la sentencia, García Luna envió una carta de cinco páginas al juez Cogan, en la que pedía una condena más corta, reafirmando su inocencia. Su defensa había solicitado una pena de 20 años para evitar una sentencia de cadena perpetua.

Arrestado en diciembre de 2019 en Dallas, Texas, García Luna anteriormente había sido director de la Agencia Federal de Investigación (AFI) en México, una entidad creada para combatir el crimen organizado durante la administración de Vicente Fox (2000-2006). Sus abogados sostienen que antes de su detención, él era un empresario legítimo que trabajaba como consultor en Florida.

Las autoridades mexicanas han acusado a García Luna de malversar hasta 745.9 millones de dólares en contratos gubernamentales relacionados con tecnología. La Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) ha revelado que, durante su gestión entre 2006 y 2012, él y sus socios crearon empresas que lograron al menos 30 contratos sospechosos. Se le acusa de desviar fondos destinados a la seguridad y tecnología de inteligencia a cuentas en el extranjero, muchas de las cuales estaban ubicadas en Barbados, para financiar lujosos bienes como condominios y autos clásicos en Miami.

Fuente: N+