El Partido Libertad y Refundación (Libre), liderado por el exmandatario Manuel Zelaya, ha convocado una movilización para este sábado en apoyo a la presidenta de Honduras, Xiomara Castro. La manifestación se organiza en respuesta a la denuncia de Castro sobre un supuesto intento de golpe de Estado, tras la difusión de un video en el que se involucra a su Gobierno con actividades ilícitas.
La marcha, programada para comenzar a las 08:00 hora local (14:00 GMT) frente a la Casa Presidencial en Tegucigalpa, busca demostrar "el decidido respaldo a la valiente lucha" de la presidenta Castro por la independencia y dignidad de Honduras, según un mensaje del coordinador de Libre y asesor presidencial, Manuel Zelaya.
Zelaya, quien lidera el partido fundado en 2011 tras el golpe de Estado de 2009, hizo un llamado a rechazar a quienes intentan desestabilizar el Gobierno. "Golpes Nunca Más", subrayó Zelaya en la red social X.
El pasado 3 de septiembre, Castro denunció que su Gobierno enfrenta un plan para "destruirlo", señalando la reactivación de "fuerzas oscuras" que, según ella, orquestaron el derrocamiento de Zelaya en 2009. La denuncia coincidió con la publicación por parte de InSight Crime de un video de 2013 en el que narcotraficantes discuten sobornos con Carlos Zelaya, cuñado de la presidenta y hermano del exmandatario.
En el video, Devis Leonel Rivera Maradiaga, exlíder del cartel Los Cachiros, ofrece un soborno al Partido Libre, mientras que Carlos Zelaya responde que "la mitad es para el comandante", refiriéndose a Manuel Zelaya.
Carlos Zelaya admitió el 31 de agosto haberse reunido con narcotraficantes para discutir apoyo financiero para la campaña del partido y, ese mismo día, renunció a su cargo como diputado y secretario del Parlamento hondureño.
La controversia se intensificó cuando, tres días antes de la confesión de Carlos Zelaya, la presidenta Castro decidió poner fin al tratado de extradición con Estados Unidos, citando "injerencias" de la embajadora estadounidense Laura Dogu, quien había criticado una reunión de autoridades hondureñas con el ministro de Defensa venezolano sancionado, Vladimir Padrino López.
Algunos analistas y políticos sugieren que la cancelación del tratado podría estar relacionada con la protección de familiares o altos funcionarios del Gobierno. El canciller hondureño, Eduardo Enrique Reina, insinuó el 29 de agosto que la decisión se tomó para evitar que el tratado se utilizara como "arma política" contra funcionarios o militares de alto rango.
