El presidente del Senado, Efraín Cepeda, ha reafirmado la independencia del Congreso frente a la amenaza del presidente Gustavo Petro de expedir el Presupuesto General de la Nación (PGN) para 2025 mediante decreto, en caso de que el Legislativo no lo apruebe.
La tensión surgió tras la presentación del PGN por parte del Gobierno, con un monto de $523 billones, que ha sido criticado por los legisladores debido a su aparente falta de respaldo financiero.
La controversia se intensificó con legisladores que advirtieron que no aprobarán un presupuesto sin un sustento financiero sólido. Cepeda destacó que el Congreso actuará con sensatez y evitará decisiones precipitadas, instando al Gobierno a revisar el presupuesto y discutir una reforma tributaria que podría ajustar el monto a un presupuesto adicional.
“El Congreso es una rama independiente del poder público; espero que el Gobierno actúe con sensatez. No podemos aprobar un presupuesto que promete más de lo que puede recaudar, lo cual solo llevaría a la frustración”, señaló Cepeda. “Hago un llamado al Gobierno para que trabajemos juntos en un presupuesto revisado, excluyendo los 12 billones de pesos faltantes, y discutamos una reforma tributaria para ajustar el presupuesto adicional.”
El senador Mauricio Gómez Amín también se mostró crítico, argumentando que el Congreso no aceptará un presupuesto sin respaldo financiero adecuado. “El presidente debe entender que no vamos a aprobar un monto insostenible. Debe reducir el presupuesto a una cifra viable para evitar futuros congelamientos y recortes”, afirmó Gómez Amín.
Por su parte, la senadora Angélica Lozano propuso ajustar el presupuesto a $499 billones para asegurar una ejecución efectiva. Lozano calificó la amenaza de Petro de expedir el presupuesto por decreto como una estrategia imprudente, sugiriendo que aunque el presidente tiene esa facultad constitucional, debería considerar un ajuste razonable antes de tomar tal medida.
“Es una maniobra imprudente del Presidente. Aunque tiene la facultad de expedir el presupuesto por decreto, debería considerar una cifra más razonable en lugar de imponer un monto desfinanciado”, dijo Lozano.
La discusión y posible votación del presupuesto están programadas para el miércoles 11 de septiembre, lo que marcará un momento crucial en la confrontación entre el Congreso y el Gobierno. La resolución de esta disputa será clave para las finanzas del país en 2025 y para las dinámicas de poder entre las ramas del gobierno.
Cepeda, Gómez Amín y Lozano han subrayado la necesidad de un enfoque financiero sólido y evitar el “salto al vacío” que implicaría aprobar un presupuesto desfinanciado. La insistencia en una reforma tributaria destaca la importancia de encontrar soluciones estructurales antes de considerar la expedición de un decreto presidencial, lo cual podría agudizar las tensiones políticas y económicas en Colombia.
El presidente Gustavo Petro mantiene su postura de no reducir el presupuesto, lo que intensifica la confrontación y sugiere que el diálogo y la negociación serán fundamentales para evitar una crisis financiera y política en el país. La evolución de esta discusión será determinante para el futuro económico y político de Colombia.
