Marko Cortés exige al INE corregir distorsiones en la representación legislativa

Redacción

 

México

El presidente nacional del PAN, Marko Cortés Mendoza, ha expresado su rechazo a los intentos de la presidenta electa Claudia Sheinbaum de consolidar una sobrerrepresentación de Morena en la Cámara de Diputados. Cortés enfatizó que esta maniobra no solo carece de base en la voluntad popular, sino que tampoco se alinea con lo estipulado por la ley. Según él, el verdadero objetivo es tomar control del Congreso de manera ilegítima.

Cortés hizo un llamado urgente a las autoridades electorales para que cumplan con su deber histórico de respetar la diversidad del voto. A pesar de que Morena obtuvo una mayoría, esta no equivale a una mayoría calificada, y por lo tanto, no deben permitirse mayorías artificiales ni autoritarias.

El líder del PAN anunció su intención de acudir el próximo martes al Consejo General del Instituto Nacional Electoral (INE). Su propósito es solicitar a los consejeros una corrección ante la creciente distorsión de los resultados electorales, demandando una interpretación y aplicación adecuada de la Constitución y las leyes.

“Acción Nacional hace un llamado al INE y a los jueces electorales para que asuman su responsabilidad de proteger la Constitución y garantizar la renovación plural y pacífica del Congreso, asegurando su legitimidad y fortaleciendo la democracia”, declaró Cortés.

El dirigente panista advirtió a Claudia Sheinbaum que el intento de apoderarse de espacios en el Congreso sin haber ganado legítimamente en las urnas no solo contraviene la voluntad del pueblo, sino que también infringe la ley y la Constitución.

Cortés subrayó que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador y su partido están buscando una sobrerrepresentación que distorsiona el voto expresado el 2 de junio. “Este esfuerzo es una estrategia para manipular la asignación de escaños y curules, alterando la representación democrática y distorsionando la voluntad popular”, agregó.

El presidente del PAN también criticó al actual gobierno por su falta de apertura y rechazo al diálogo, destacando que una mayoría manipulada permitiría la aprobación de leyes y reformas constitucionales sin necesidad de consensos amplios. Esto, según él, debilitaría el principio democrático de la representatividad y podría llevar a la restricción de derechos y libertades, además de la desaparición de organismos autónomos y el sistema de pesos y contrapesos.

Finalmente, Cortés condenó la manipulación de los procesos electorales para favorecer a un solo partido y subrayó la importancia de que la sociedad y los actores políticos permanezcan vigilantes. Es crucial, dijo, demandar reformas que aseguren una representación justa, equitativa y verdaderamente democrática.