Jalisco
Situaciones extremas de bullying donde se llega a matar a una compañera de escuela, como el caso más reciente en el Estado de México, donde los golpes que le propinó Aylin a Lizbeth le causaron la muerte; o el de Yahir, un adolescente de tercer año de secundaria en Lagos de Moreno que se suicidó hace casi un año porque sufría violencia, busca evitar la Secretaría de Educación Jalisco.
Definido el acoso escolar como una agresión entre dos estudiantes (iguales), con antecedentes de repetición de violencia (física o psicológica) y marcada por la diferencia de poder de un alumno sobre otro, las estadísticas de la secretaría de Educación en Jalisco, tiene al momento, durante este año, 20 casos en revisión.
El año pasado (2022) ha sido el más fuerte al registrar 153 expedientes, mientras que en 2018 se presentaron 86 y en 2017, la cifra fue de 140 casos de bullying.
La mayor parte de los casos se presentan en un 55 por ciento, en alumnos de primaria, mientras que el resto, 45 por ciento, a nivel secundaria y muy pocos en kínder.
Son situaciones donde además de atender al agredido, se asiste también al agresor, como una persona que, para ejercer la violencia, quizás sea receptor de ésta o carezca de atención en su entorno familiar.
Si bien la pandemia, luego de dejar el encierro y regresar a las aulas, modificó el comportamiento de los adolescentes y niños, los casos se han incrementado por esta situación.
Pero también porque ahora todas las situaciones de indisciplina hacia algún compañero, se atienden y registran como acoso escolar, algo que no se hacía antes del 2020, año en que se modificó la Ley General de Educación y Ley de Educación del Estado Libre de Jalisco, según Nadia Soto Chávez, directora de Programas Estratégicos de la secretaría de Educación.
Fuente: Quadratín Jalisco